La grelina u hormona del hambre, es sintetizada por las células endocrinas P/D1 ubicadas en el fundus gástrico. Además de estimular la secreción de hormona del crecimiento (GH) en la hipófisis, la grelina favorece la regulación del metabolismo energético. Actúa sobre el núcleo hipotalámico arcuato, región del cerebro involucrada en el control de la temperatura, la conducta sexual y el hambre y la saciedad, entre otras conductas.